Estimada comunidad Beteliana, que Dios les bendiga grandemente y, como dice el apóstol Pablo, que el Amor, la Esperanza y la Fe, les sean grandes regalos, porque ahora nos toca reconstruir y darle sentido a todo lo que hemos vivido.
En el colegio Bet-El también nos esforzaremos por vivir en comunidad y tomar desiciones difíciles, pero que con el acuerdo de todas las personas involucradas, principalmente pensando en el bienestar emocional, físico y académico de los betelianos, desde los más pequeños hasta los más grandes, hoy más que ayer, necesitamos vernos a los ojos y a decir cuál es nuestra esperanza, donde esta nuestra fe y con qué intensidad palpita nuestro corazón.
No bajemos los brazos, aunque tengamos pandemia o aunque nos pasen cosas malas, o cosas que no entendemos bien porque no las controlamos. Usted no está nunca sólo, primeramente tiene a Dios, búsquelo a Él, y también tiene a su familia y amigos, para que puedan esforzarse y tener buenos momentos de alegría, y por supuesto, también cuenta con su Colegio Bet-El, que nuestra vocación este año es la sana convivencia, para que recuperemos los años en que no pudimos compartir y crecer juntos.
Adelante Betelianos, vamos a triunfar.